Lapislázuli, la piedra de la sabiduría

Vamos a conocer un poco más acerca del laspilázuli. Todo el mundo asocia este mineral con el Antiguo Egipto. Las reinas lo usaban en polvo para hacer sombras de ojos y no faltaba como pieza principal de las joyas de los faraones. Y es que los egipcios eran muy listos y recibían su sabiduría directamente de los atlantes, seres de luz encarnados en la Tierra que dirigían y encauzaban la evolución de los hombres. Ya en esa época se decía que el lapislázuli, con su profundo azul oscuro y sus motas de pirita, que recuerdan a las estrellas, era una representación del cielo nocturno, o de un trocito de Universo. Muchos faraones lo usaron en sus tocados, cerca del tercer ojo. Decían que el lapislázuli les aportaba sabiduría para gobernar. Y desde luego, no era superstición, pues esta piedra resuena directa con el chakra del tercer ojo y nos abre la intuición. También los curanderos egipcios realizaban una suerte de cápsula con laspislázuli molino que utilizaban para curar cálculos renales. No probéis esto, porque los cálculos renales igual se curaban, sí, pero con la muerte por intoxicación ya que esta belleza es tóxica. En cualquier caso, el laspislázuli es una de las piedras más bonitas que hay, ayer y hoy. Debo advertir que este mineral comienza a escasear, como el otro as de los egipcios, la turquesa, y se vende a precios altos. Muchos vendedores lo confunden con la sodalita pero solo tienen en común que son azul oscuro. Muchos otros venden lapislázuli de baja calidad. Si queréis saber cómo es el auténtico y de calidad, os diré que el laspilázuli debe tener motas de pirita y pocas, o ninguna, veta blanca. Además el azul de la sodalita es más oscuro que el del lapislázuli.

Se vende como "corazón de lapislázuli" pero es claramente sodalita.

El lapislázuli, además de abrir el tercer ojo, equilibra el chakra de la garganta, el que se relaciona con la comunicación. Por lo que su principal objetivo es ayudarnos a comunicarnos desde un conocimiento más alto y aportarnos sabiduría espiritual. Y ahora sí, hechas las presentaciones y aclaraciones, veamos sus beneficios.

PROPIEDADES

- Estimula la Iluminación y potencia el trabajo con sueños y capacidades psíquicas ya que facilita el viaje espiritual y aumenta nuestro poder espiritual. 

- Actúa como un tranquilizante feroz cuando detecta estrés en nuestras emociones, por lo que sentiremos paz y calma totales. Desde este estado de tranquilidad, podremos realizarnos y comprender mejor la espiritualidad.

-Ya hemos visto que nos protege del estrés, pero también de ataques psíquicos que neutraliza y devuelve a su origen. Es decir, si alguien nos echa un mal de ojo, por ejemplo, el lapislázuli impide que llegue a nosotros y lo devuelve a quien lo generó. 

-Puesto que trabaja también con la garganta, facilita la comunicación y disuelve los problemas que hayan podido originar por falta de comunicación o no haber sabido expresarse en el pasado.

- El lapislázuli limpia y energetiza los bloqueos que podamos tener en cualquiera de nuestros cuerpos; físico, mental, emocional y espiritual. Al no existir bloqueos en estos cuerpos, nos encontraremos más calmados y podremos dedicarnos al autoconocimiento interno. ¿Quiénes somos realmente? ¿Cual es nuestra esencia? El lapislázuli nos ayuda en el camino de estos descubrimientos. 

-También mueve a esas personas que se dejan arrastrar por las circunstancias o por lo que otros esperan de ellas a coger las riendas de su vida.

-Hay gente que tiene una gran cólera en su interior y saben que si hablan darán rienda suelta a su furia. Por eso es habitual que las personas malhumoradas sean calladas. Pues el lapislázuli disipara esa rabia atenazada en la garganta para que puedan volver a expresarse con honestidad, compasión y rectitud.

-Como ya he dicho, los faraones la usaban en los tocados porque amplifica el pensamiento ya que estimula las facultades mentales superiores y nos aporta claridad y objetividad en nuestras decisiones y armoniza los conflictos.

-Para aquellos que temen la verdad, esta piedra les ayuda a vencer el miedo y ayuda a integrar los aprendizajes que conlleva tener los ojos abiertos. 

-La comunicación se basa tanto en saber cuándo y cómo hablar como en el saber escuchar. Muchos de los que hablan, hablan y hablan, pero no escuchan, no son comunicadores, son monologiustas. Pero el lapislázuli puede enseñarles el arte de escuchar.

-A parte de sus funciones para que nos expresemos desde la verdad y la justicia, o quizás a causa de ellos, este mineral también favorece las relaciones de amor y amistad y ayuda a las personas que temen expresar sus sentimientos. 

- Nos saca del papel de víctimas, de crueldad y sufrimiento.

-A nivel físico, es un excelente calmante de migrañas. Ayuda a superar la depresión y trabaja sobre todas las enfermedades relacionadas con la garganta y el sistema respiratorio como el asma, anginas o problemas de tiroides. Alivia el insomnio, el vértigo y baja la presión sanguínea alta. 

CÓMO USARLO

Si queremos hacer un elixir, que nos ayudará a disolver ataduras emocionales, deberemos recurrir al método indirecto, porque como he dicho el lapislázuli es tóxico. Pero también podemos llevarlo, como hacían los faraones, en collar o colgante, o en cualquier otra joya que se halle cercana a la garganta o el tercer ojo. 

Puedes meditar con él colocado en cualquier punto entre el plexo solar y el coronario. Yo lo he usado con algunas personas que querían hacer regresiones, pero que se bloquean antes de hora porque creen que no van a poder ver nada o incluso temen lo que puedan sentir. El lapislázuli en forma de pirámide sobre el tercer ojo conecta con la sabiduría y ayuda a ver a quien quiere ver aunque no se atreva. 

LIMPIEZA Y CARGA

En todos los sitios que he indagado dicen que es malo meter el lapislázuli en agua con sal, pero yo siempre los he limpiado así y están tan bonitos como el primer día. Lo que sí es importante es no dejarlo a la luz del sol, ya que puede decolorar su profundo color cobalto, pero la luz de la luna lo cargará con mucho amor y sin que sufra ningún percance. 

Y hasta aquí los principales datos sobre este mineral tan hermoso que ha sobrevivido tantos siglos sin perder su valor tanto en orfebrería, como en sanación. A mí me encanta y no sólo porque porque es precioso, que también, sino porque resuena mucho conmigo y mis vidas en Egipto. Y a vosotros, ¿qué os parece?

ADVERTENCIA: Las piedras solo son una ayuda para nuestros propósitos. No curan por sí solas a nivel físico o psicológico, ni podremos canalizar o limpiar energías si no hemos aprendido las técnicas adecuadas. A nivel emocional, si queremos trabajar asuntos como la autoestima, la ira o las ideas limitantes, la piedra por sí sola no hace milagros; ellas solo pueden ayudar a los que se ayudan.

Para realizar estas fichas me sirvo de La biblia de los cristales y de mis propias indagaciones en distintas páginas webs, además de la información compartida con profesionales. En algunas ocasiones, simplemente canalizo la información que me llega de "arriba" y escribo en función de las piedras que "me lo piden".

Bibliografía:

HALL, Judy: La biblia de los cristales. Vol. I; Gaia Ediciones, Madrid:2005