Moldavita

La entrada de hoy versa acerca de un cristal muy, muy especial. ¿Qué por qué es tan especial? Pues ni más ni menos porque no se trata de un mineral de este mundo. Y no es exageración; es estrictamente cierto. Y es que la moldavita son fragmentos de un meteorito que cayó hace miles de años en la Tierra. De ahí que su precio sea tan elevado y no se encuentre en cualquier parte. Estamos hablando de un material que, al no ser producido naturalmente por la tierra, es finito, es decir, que comienza a agotarse y únicamente se encuentra en el lugar donde impactó el cuerpo celeste: la República Checa. Como pasa con todos los cristales extraños, existen numerosas falsificaciones que pueden endosarnos como moldavita. Sin embargo las falsificaciones son fáciles de detectar dado que el color y la superficie de la auténtica moldavita es inimitable. Su color verde profundo y traslúcido, recuerda al de la esmeralda. Tanto es así, que se existe la hipótesis de que Las tablas esmeralda de que Thoth en la época egipcia, o Hermes Trimegisto, el tres veces nacido, en la cultura helénica, escribió sus conocimientos sobre este material eterno e imperecedero. Si seguimos la idea de que Thoth "el atlante", fuera un ser de luz de otra dimensión deificado por los humanos, es más plausible que utilizase este potente material para grabar su hermética sabiduría. 

Espero que, con estas palabras, os haya transmitido la fascinación que siento por esta piedra. Pero también es obligado advertir que este cristal extraterrestre no puede usarlo cualquiera, y que aún aquellas personas cuya vibración esté en sintonía con la de la moldavita, es solo para valientes que estén dispuestos a renunciar a aspectos de su vida, como pueden ser cosas materiales, trabajos o relaciones. El motivo es simple, la moldavita nos lleva a la evolución sin muchos miramientos. Si tenéis una relación tóxica con alguien, ya sea pareja, amistades o familiares, la moldavita nos lleva a que esa relación se rompa en aras de nuestro avance. Si estamos atrapados en un trabajo que solo nos proporciona una estabilidad económica, pero que nos aleja de nuestro propósito de vida, una vez la moldavita esté en nuestro poder, no tardaremos en ser despedidos. En resumen, este cristal nos saca de nuestra zona de confort, por las buenas o por las malas; nos lleva a caer en lo más bajo para que podamos reconstruir nuestra vida sin apegos a lo material o a lo que, aunque pensemos que nos da paz, felicidad o tranquilidad ficticias, desaparezca de nuestras vidas.

Por otra parte, muchas personas, cuya vibración aún no es lo bastante alta, se sienten mareadas, con fuertes jaquecas y con nauseas al acercarse a esta piedra. Si me permitís, os contaré mis experiencias personales con esta piedra para que os hagáis una idea más palpable acerca de cómo trabaja esta sustancia. 

Cuando descubrí las propiedades de esta piedra, y atraída por su color verde, que trabaja a fondo el chakra corazón (chakra conflictivo para mí), me puse a la búsqueda y captura de una pieza. Me parecía un reto; quería ver si mi vibración soportaba la del meteorito y, puesto que el miedo es algo de lo que carezco, estaba dispuesta a ver cómo podía ayudarme. Lo cierto es que nunca sentí malestar físico al llevarla como colgante, pero comenzaron a aparecer más obstáculos de lo normal en mi vida. Compré mi moldavita por internet y parecía que a medida que se iba a cercando a mí, mi via crucis comenzaba. En realidad, la compré convencida de que poco más me podía quitar el cristal cuando yo ya me encontraba saliendo de la época más difícil de mi vida, pero me equivocaba. A uno de mis familiares más cercanos le detectaron una obstrucción en una arteria que casi le cuesta una amputación. Yo tuve que asumir su papel mientras estuvo convaleciente; tras varios robos, multas e incluso grúas, tuve que deshacerme de mi coche, que tanto me costó comprar, aunque los fines con los que lo compré eran totalmente fatídicos. Al final tuve que deshacerme de él. Al poco tiempo, un ser muy querido para mí, falleció. Esa persona no era negativa, al contrario, pero el amor que nos profesábamos, y su avanzada edad, me impedían reunir el valor de alejarme de él. Siempre sentía una nube oscura sobre mi de agobio y desesperación hasta que una terapeuta energética testó el efecto que la moldavita producía en mí y me dijo que me la quitase inmediatamente. Desde que me la quité, comencé a recuperar el control de mis emociones y, si bien mi vida no se volvió un lecho de rosas, al menos dejé de sufrir pérdidas y recuperé el control de mis emociones. Después de eso, la regalé a alguien que consideré que le ayudaría en su propósito de realizar viajes astrales, no si advertirle de los "efectos secundarios". No consiguió realizar ningún viaje, hasta dónde yo sé, pero comenzó a tener problemas en el trabajo y en su ámbito doméstico. 

Y ahora que estáis avisados, si os gustan los retos o queréis alcanzar la Iluminación por la vía rápida, os describo algunas de sus propiedades además de las que se desprenden del texto:

PROPIEDADES

- Es un perfecto testador de nuestra evolución en esta vida y nuestra vibración.

-Nos empuja fuera de nuestra zona de confort sí o sí.

- Nos ayuda a contactar con nuestro Yo Superior y seres de otras dimensiones (seres de luz).

-Se dice que observar fijamente el interior de este cristal al trasluz eleva nuestra conciencia, pero hay que tener cuidado de no desarraigarnos de la Tierra y nos quedemos "perdidos por ahí arriba". Para aterrizar, se recomienza usar piedras boji, que asientan. 

-Combinada con otras piedras, eleva a su máxima potencia la vibración de las demás gemas. 

-Al ser un cristal que solo emite energía, y no la absorbe, no necesita limpieza. 

-Permite ver vidas pasadas, para saber qué lecciones tenemos pendientes en esta, y también visitar vidas futuras para descubrir si lo logramos.

-También facilita los viajes astrales. 

-Se dice que ayuda a aquellas personas que no estamos felices en el plano terrestre y la encarnación, y que no pueden soportar el sufrimiento y las emociones extremas que conlleva nuestro atavío carnal. 

-Nos lleva más allá de nuestros límites personales

-Nos desapega de los asuntos materiales terrenales, como el dinero, el lujo y de todo aquello innecesario para nuestra alma. Puede que Diógenes el Perro se bañase con moldavitas :) 

-Nos guía para poder realizar nuestro propósito de vida y conocer nuestra esencia.

-Fomenta la empatía y la compasión.

-Es óptima para la lectura de Registros Akáshikos. 

-Acelera el crecimiento espiritual y eleva nuestra vibración.

-Físicamente, la moldavita no sana sino que nos muestra el origen emocional de nuestras dolencias para que rectifiquemos y nos sanemos nosotros mismo a un nivel más profundo. 

-Se dice que también sirve de tester acerca de nuestras emociones; si te repele su color verde, es probable que desprecies las emociones y el amor incondicional. 

La moldavita no necesita limpieza ni recarga, ni programación. Sus formas de uso se limitan a la observación, o a colocarla al meditar sobre nuestros chrakras superiores; corazón, garganta, tercer ojo y corona. Si la usamos como colgante, cerca del chakra corazón, ella decidirá cuál es el trabajo que más necesitamos y se empleará en ese asunto. 

Y ya que yo os he contado mi experiencia personal con la moldavita, sería muy instructivo que, aquellos que ya han trabajado con ella también contasen sus experiencias para futuros propietarios. Animaos a contar si os ayudó o tuvisteis que desistir, como yo en su uso. Y los que no la han probado aún, sed valientes y animaos a poneros a prueba. Aunque este cristal escoge cuidadosamente a su humano, sed valientes y probadla. ¡La Iluminación bien vale un poco de sacrificio!